El eco del latido de un corazón resuena con las alas danzantes de la mariposa planeando con el viento, volando sobre el océano estelar que brillaba como reflejo de su luz interior. Aterrizó de una manera suave y gentil llevada por la ballena cantora en las profundidades del océano. La tierra comenzó a moverse, arrastrándose lentamente.
Gaianauta sentada en silencio sintiendo su corazón unificándose con los latidos del océano, la tierra y el cosmos. Al abrir los ojos Gaianauta se encuentra montada sobre una bella serpiente de colores tornasol. Se recostó boca abajo y se conectó con la vibración de las escamas floridas de este mágico ser. Con un oído escuchado el eco de su propia resonancia dentro del cuerpo arcoiris sobre el que ella se sumerge al centro de Gaia. Mientras que una suave lluvia se deja caer, las gotas como tambores daban la bienvenida al espíritu del cambio y la muda del desapego se sintió en cada trueno. La danza de la serpiente con Gaianauta en su lomo se convirtió en su plegaria. Se miraron fijamente a los ojos y Gaianauta entro a la boca de la serpiente en reverencia y honrando la entrada a su ser se adentro hasta llegar al corazón. Al mismo tiempo los colores arcoiris tornasol se ordenaban para hacer la muda de piel y su acto de renovación, un fuego se encendió en el centro y la danza continuo. En este momento recibió los siguientes mensajes > Solo tu puedes salvarte, amarte, cuidarte, solo tu puedes soltarlo todo y dejar ir.... entregarte. Mira cómo los recuerdos se desmoronan mientras mudo de piel y cómo, al hacerlo, te está sucediendo lo mismo. Ahora somos UNO y el AHORA es lo único que poseemos, así que suelta mi amor, déjate llevar. Simplemente ríndete a los nuevos colores que el universo te está pintando. Déjate ser el lienzo donde la vida y el orden divino se manifiestan. Brilla, fuerte como el sol, una expresión de amor, una historia única. Vive desde tu corazón. Deja que ese sol te bese la piel y selle este poderoso manifiesto, sumérgete como una gota de lluvia se funde en el oceano. Son las olas la danza incesable de la serpiente enroscada en el fondo que se sumerge hacia el centro de la tierra en espiral, con cada vuelta se va purificando y desvaneciendo como espuma en la arena.